18 nov 2011 Plutarc ho sabia

Montserrat Nogueras ha traducido al catalán las palabras de Plutarco (un volumen delicioso editado con gusto por Adesiara que reúne Consells sobre política y A un governant incompetent) en el mejor momento. Escribe el clásico: «No es posible ocultar los vicios cuando se ocupa el poder, sino que pasa como con los epilépticos, que, cuando están en un lugar elevado y se les hace circular, les ataca el vértigo y una agitación que prueba su enfermedad». Según todos los augurios, a Rajoy le tocará esconder los vicios a partir del día 21. Para la prensa británica, los vicios del conservador gallego son ya un gran problema europeo. Que se prepare el nuevo presidente: no tendrá ni veinticuatro horas de gracia.

Estoy filosófico, debe ser que mañana es día de reflexión; ahora está de moda decir que habría que suprimirlo pero yo pienso que es una jornada fantástica: sirve de purgante. Como veo que la melancolía vuelve, me viene a la cabeza lo que, me parece, escribió Ortega y Gasset, que hoy votaría a Rosa Díez: el esfuerzo inútil conduce a la melancolía. Fíjense bien: Consigues vencer a los enemigos (que siempre son tus compañeros de partido), te presentas a las elecciones, ganas a los adversarios (que normalmente pierden solitos) gobiernas y, a partir de aquel momento, debes hacer lo posible para que no te sustituyan por un Monti. ¿Tanto esfuerzo para eso? Rajoy me ha enviado una carta donde dice: «Trabajando juntos y sumando esfuerzos, lograremos salir adelante». ¿Cómo es que todavía lo llaman política?